Un jugador que fungía como manager de su equipo de Call of Duty es despedido por intolerante. El anuncio lo hizo Cyclops Gaming, un equipo japonés de esports de la región de Osaka a través de su cuenta de Twitter.
Este anuncio llega horas después que una jugadora de Tekken la despidieron por afirmar que los jugadores con baja estatura no merecen derechos humanos. Ambos hechos demuestran que se están aplicando medidas de cero tolerancia ante este tipo de abusos.
El jugador en cuestión, recibió la noticia de que su contrato había llegado a su fin; aunque las razones no fueron especificadas. El comunicado fue breve y conciso y dice lo siguiente: “Desde el 18 de febrero de 2022, Cyclops Athlete Gaming canceló su contrato de equipo con Kbaton”.
Como puede verse en ninguna parte se expresan las razones del despido; no obstante, después se conocieron.
El jugador después de su despido calificó a internet como algo aterrador
Ahora veamos las causas reales que motivaron el despido del jugador profesional de Call of Duty. Todo comenzó con unas publicaciones hechas en Twitter por el atleta conocido como Kbaton; en estas este hizo comentarios homofóbicos y discriminatorios contra niños discapacitados. Lo que agrava el panorama es que lo hizo en reiteradas ocasiones.
Una vez que se regó la noticia, el jugador quiso restarles importancia a sus declaraciones. Luego terminó calificando a internet como ‘algo aterrador’. Acto seguido eliminó su cuenta de Twitter y su equipo por su parte lo borró del sitio oficial de Cyclops athlete Gaming.
Lo curioso del hecho es que en menos de 48 horas dos jugadores de esports corrieron con la misma suerte; y ambos por faltar el respeto a personas con ciertas condiciones; simplemente por ser diferentes.
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