Análisis de Metal: Hellsinger | El sonido de los demonios jamás había sido tan dulce

Existen juegos que definen estéticas de una manera única y sin igual, que apenas ves algún nuevo juego que imite cercanamente al anterior, no podrás evitar decir “Oh pero esto es igual a …”, y que, si bien puede parecerse en gameplay, sabes y se siente que no es más que una copia barata que jamás llegará a los talones del original. A penas se dio a conocer este juego, lo primero que se pensó masivamente fue “Es un Doom de música”, pero la gran diferencia que tiene Metal: Hellsinger con el resto de juegos que pasan por ese tipo de situaciones es que, si bien Metal rescata muchos elementos tanto estéticos como de gameplay, logra prevalecer como un juego único con mecánicas muy pulidas y un sonido espectacular.

Desarrollado por “The Outsiders”, Metal: Hellsinger rescata elementos de varios juegos (BPM: Bullets per minute, Crypt of the Necrodancer, el fallido shooter de los creadores de Rock Band, Doom, entre otros) para entregarnos un viaje al infierno lleno de música original, con voces reconocidas tanto en el mundo musical como en el mundo videojuegos, poniéndonos en la piel de “La Extraña”, una demonio que perdió su voz a manos de “La Jueza Roja”, y en busca de re-obtener su tesoro más preciado, se ve atrapada en el círculo más profundo del infierno. Mientras La Extraña busca una forma de escapar, ella percibe un llamado de un ser diferente, Paz (Cuya voz está hecha por Troy Baker!), un cráneo iridiscente que se presenta como tu primera arma fuera de tu espada, y también como tu acompañante y narrador durante toda la aventura.

Gráficos de Metal: Hellsinger: «Todo está diseñado para sentirse ‘Metal'»

El juego nos presenta unos gráficos dignos de la generación actual, con luces, sombras y animaciones fuera de este mundo. Con un HUD bastante sencillo, el juego mantiene tu atención principalmente en el centro de la pantalla, donde tendrás un visor de ritmo que te permitirá saber con mayor facilidad cuando atacar y realizar la variedad de movimientos. Además de esto, la interfaz completa del juego está construida muy ad-hoc a todo lo que presenta como concepto, por lo que es una experiencia que se siente muy completa y bien armada. Jamás te sentirás fuera de una historia infernal, ya que todo está diseñado para sentirse “Metal”.

Fuera de los aspectos a grandes rasgos, existe un solo detalle que visualmente no me gustó, y es que las puertas que te retienen de avanzar entre secciones se sienten en parte fuera de lugar. Con un diseño tan sencillo como geometrías sueltas, los efectos visuales hacen que se pueda sentir como parte del juego, sin embargo al verlos con mayor detenimiento te darás cuenta de que son elementos que están fuera de lugar. Eso, si es que te dedicas a observarlos y no a moverte, que es uno de los requerimientos que el ritmo de juego exige.

Jugabilidad de Metal: Hellsinger: “Feel as though nobody cares if I live or die”

Lo primero que se nos viene a la mente al ver los trailers de Metal: Hellsinger es que debe ser muy parecido a Doom; ¡Y lo es!, solo que puede mantener una identidad única solo gracias al nuevo género agregado al shooter, pero, ¿Cuanto tiempo puede mantenerse esto fresco y divertido?, ¿Lograría esto sentirse como un juego completamente nuevo y no solamente un “Rip-off”?

El juego presenta inicialmente un tutorial bastante sencillo, y en teoría este no termina hasta más o menos la cuarta etapa, donde obtendrás tu última arma. El juego se va adaptando bastante bien a lo que entrega, haciendo que no solo se sienta sencillo, sino fácil de iniciar y divertirse, manejando un gameplay muy parecido al de cualquier shooter (o boomer shooter), por lo que es saber visualizar a tus enemigos y lanzarte a la batalla, con el único pero de que en este juego deberás seguir el ritmo (o Beat) de la música para poder realizar cualquier acción que no tenga que ver con movimiento. El progreso como jugador se hace evidente al ir pasando etapas, no solo porque vas dominando mejor el cómo funciona el golpear con el ritmo, sino también porque tendrás nuevas armas que irán agregando nuevos movimientos a La Extraña y te harán sentir desde más hábil hasta más poderoso, generando una sensación de crecimiento en el jugador bastante gratificante, en especial al ver como los enemigos caen una y otra vez gracias a ti.

En cuanto a gameplay propiamente tal; El juego nos presenta un multiplicador de puntaje por cada acción al ritmo que hagamos, como también nos presenta un contador de combos (Que se perderán por o fallar una parte del ritmo, o por recibir algún daño), siendo estas partes la que más hace que el juego se sienta diferente al resto. Los multiplicadores de puntaje (1x, 2x, 4x, 8x y 16x) hacen que la música vaya In crescendo, agregando más instrumentos y voces al soundtrack que vas escuchando mientras juegas. Esto entrega una sensación genial en el ritmo del gameplay mismo, ya que no es solo escuchar música, es mejorarla y motivarte cada vez más, el sonido te irá diciendo qué tan bien estás rindiendo, y al mismo tiempo, arma el hype de una manera increíble para matar demonios en pleno infierno. Mientras más combos vayas acumulando, además, más complementos obtienes para La Extraña, como poder cargar ataques especiales más rápido (Que obtienes al realizar bien secuencias con armas puntuales), poder moverte algo más rápido, entre otras mejoras.

Cabe destacar que se pudieron jugar tanto las versiones de Xbox como la de PC, siendo esta última la versión más cómoda y sencilla de jugar. Lamentablemente, al ser un juego de ritmo y disparos, el uso de control no entrega sensaciones tan cómodas y terminan rompiendo el flujo de juego, al tener que ir presionando un gatillo una y otra vez no solo se vuelve agotador, si no que también es mucho menos preciso a la hora de querer disparar al ritmo. Lo bueno es que también el juego está diseñado para no pasar mucho por estos dolores ya que su duración no es tan larga, un tema que tocaremos en los siguientes puntos.

Un detalle que también gustó fue que el juego está lleno de referencias al rock y al metal, por lo que más de alguna sonrisa sacará con solo ver los logros, o incluso al cerrar el juego desde el menú, donde la Extraña terminará despidiéndose del jugador con un legendario “lml”. Además, como dato extra, de parte de los desarrolladores se anunció que ya están trabajando en una forma de poder implementar canciones extra para los jugadores de PC, no en forma de DLC, sino como forma de Mod.

Sonido del Metal: Hellsinger: “Heavy Metal is THE LAW”

El sonido es un elemento clave en Metal: Hellsinger, no solo porque obviamente nos encontramos con un soundtrack espectacular (De la mano de Two Feathers), sino por las voces que nos acompañan durante la aventura (Mikael Stanne de Dark Tranquility, Alissa White-Gluz de Arch Enemy, Serj Tankian de System of a Down, entre otros) y también por los efectos de sonido, que complementan aún más esta experiencia y dejando en claro que es una experiencia completamente musical. Esto se da a notar principalmente cuando vemos las opciones en los menús, donde al elegir algo podremos claramente escuchar baquetas y efectos relacionados con instrumentos.

Si bien el sonido y la música son un fuerte tremendo de este juego, al mismo tiempo puede saturarse y sentirse incluso más lleno de lo que debería, provocando incluso problemas de espaciosidad a la hora de identificar desde dónde viene cada sonido, aunque a falta de esto, el juego incluye un sistema que te permitirá ver dónde están los enemigos que te faltan poniéndolos de manera iridiscente, esto claramente para que puedas seguir sintiendo el ritmo y no te sientas agobiado por tener que buscar enemigos. Por otra parte, es lindo ver y sentir como todo el juego está diseñado estéticamente hablando en torno al sonido y la música, dejando en claro que no es solo un apoyo como puede ser en muchos otros juegos, sino también un pilar y la base del juego mismo.

Duración de Metal: Hellsinger

Metal: Hellsinger no cuenta con una duración muy larga, es más, diríamos que el juego es corto en comparación a otras entregas del mismo género, pero es a su propio favor.

El juego cuenta con 8 etapas más el tutorial, y ninguna de estas etapas te tomaría más de 20 minutos en terminar. Con una duración aproximada de 4 horas, considerando el juego principal y los retos para desbloquear cosas secundarias, lo cuál funciona muy a favor de Metal: Hellsinger debido a que el juego podría llegar a sentirse algo repetitivo para parte del público, en especial para aquellos que no son tan adeptos al género musical dentro de los videojuegos.

Por otra parte, si bien las etapas son cortas, el juego permite extender nuestra estadía al entregarnos retos que se desbloquean al terminar cada etapa, retos que al terminarlos nos harán entrega de un poder para mejorar nuestra experiencia de juego. Lamentablemente, si bien los retos son sencillos y ayudan bastante con lo que nos entregan, son bastante cortos (Con una duración no mayor a 5 minutos cada uno) y repetitivos, pero al menos siendo pocos (3 por nivel) y cortos, no llega a sentirse agotador ni saturante.

Nuestra opinión de de Metal: Hellsinger

Definitivamente, Metal: Hellsinger es un juego que te mantendrá interesado de alguna u otra manera; Sea por su gameplay y su facilidad de mantenerte en el juego, por su música, o por su estética. Cada uno de sus detalles puede resaltar por sí solo, como pueden notar, todos los puntos del juego dan bastante de qué hablar, al punto en que son fáciles de reconocer y relacionar. Afortunadamente además, tenemos presente un juego que no solo es divertido, también logra innovar en un género más que explorado como lo son los shooters en primera persona como se menciona en el apartado de jugabilidad, dándonos un juego que a más de alguien le darán horas de diversión y de atención por su música, además de dejarnos un OST espectacular que pueden encontrar gratuitamente en YouTube, con artistas de renombre como se nombra en el apartado de sonido.