Debido a la gran demanda de iPhone X, Apple ha decidido dividir la tarea de la fabricación de sus pantallas OLED en dos proveedores. Actualmente el único encargado era Samsung, su principal competencia y a partir del segundo semestre del 2018, LG también formará parte de la producción de pantallas para Apple.
Existe el rumor de que LG consiguió el contrato de la fabricación de pantallas OLED 6.5 pulgadas, lo que significa que estarían trabajando en una versión, como puede ser el iPhone X Plus o bien un nuevo modelo de iPhone. Mientras tanto, Samsung será el encargado de la producción de las pantallas de 5.8 pulgadas para el iPhone X; esto también creará una nueva rivalidad entre ambas marcas respecto a la calidad de sus pantallas.
Samsung actualmente posee el 95% de la producción mundial de pantallas OLED, lo cual no es algo para olvidar, mientras que LG nunca se destacó por su gran calidad de imagen. Aunque, si Apple confió en ellos, razones de sobra deberán tener para confiarles una parte fundamental de sus próximos terminales.
El año pasado Apple también invirtió US$2,700 millones en LG para mejorar y ampliar la capacidad de producir gran cantidad de pantallas OLED. Para este 2018 se espera el lanzamiento de dos nuevos iPhone y quizás una segunda versión del iPhone SE manteniendo las cuatro pulgadas de pantalla.
