Cuando se anunció la adaptación cinematográfica de Warcraft de inmediato concentró la atención de millones de fanáticos del popular videojuego. Tenía a un gran director como Duncan Jones, un buen reparto, entre ellos Travis Fimmel (Ragnar en Vikings), y un gran lore en el cual basarse. Sin embargo, el resultado no fue el esperado.
En términos monetarios no tuvo pérdidas, con un coste de 160 millones de dólares pudo recaudar más de 400 millones de dólares. El problema es que Warcraft dividió a críticos que consideraron que la película no era suficientemente profunda, y que la película desperdició todas las virtudes que ofrecía el videojuego. Por otro lado, al público en general le gustó, considerándola como una película divertida y que no decepcionó. Un claro ejemplo de esta división es la diferencia expresada en Rotten Tomatoes, donde cuenta con un 28% de aprobación en la crítica mientras que por parte de la audiencia mantiene un 76%.
Finalmente, la división de opiniones terminó sepultando la idea de una secuela y nunca más supimos de los planes que tenían hasta ahora. El director, Duncan Jones, ante la pregunta de un seguidor contó cual era el rumbo que tenía pensado para otras películas basadas en Warcraft en el caso de que le hubieran dado luz verde al proyecto.
Atentos y atentas que ahora vienen los spoilers. Hay que recordar que Warcraft terminaba con el portal cerrado, Durotan muerto y Lothar como líder de la Alianza. Go’el, el bebé hijo de Durotan, es encontrado por un humano para eventualmente convertirse en Thrall. Según Jones los planes eran realizar una trilogía que expandiera los eventos de la primera parte.
La secuela de Warcraft tendría a Thrall como un joven orco esclavo en un campamento de gladiadores, ahí conoce a Tauren. En esa película descubre una tierra en el oeste, que es de donde proviene su raza y donde podría encontrar otros como él. La tercera parte hubiera introducido a la horda y la liberación de los orcos. Esta misma también mostraría el viaje a través del mar hasta Kalimdor, la fundación de Orgrimmar, la primera ciudad Azerothiana.
“Básicamente la trilogía era el cumplimiento de la promesa de Durotan de darle a su pueblo un nuevo hogar”, dijo Jones sobre los planes de Warcraft, sin embargo, sus planes se vieron obstruidos por la recepción de la primera película. ¿Les gustaría haber visto estas ideas en una trilogía? ¿Les gustó la primera película?
