Activision Blizzard parece destinada a destruirse desde adentro, pocas veces puede observarse una implosión empresarial de esta magnitud. Mientras la ola de despidos y renuncias aún no llega a la orilla, la marejada se intensifica tras un nuevo escándalo. Un reportaje publicado por el Wall Street Journal asegura que Bobby kotick, Ceo de la compañía ha sido acusado de maltratar a mujeres de su empresa y también fuera de ella.
El reportaje llega en medio de aguas que no se calman y el viento que las agita. En él se afirma que Kotick, tenía conocimiento de los acasos de acoso que ocurrían puertas adentro de la compañía y que procedió a minimizarlos y a ocultarlos. Por si fuera poco, se le acusa de haber participado en algunos abusos que incluían maltratos hacia empleadas. También se conoció que desde todos los niveles de Blizzard se está solicitando la remoción del CEO del cargo que ostenta.
Blizzard inundada de denuncias y Bobby Kotick con el agua al cuello
Lo publicado en el The Wall Street Journal, ha soltado las pocas amarras que sostienen a Activision Blizzard y a estas horas parece un barco a la deriva, para complemento su capitán está a punto de caminar por la tabla. La efervescencia que ha causado la noticia en las redes sociales, se suma al amotinamiento interno de los empleados que están pidiendo el reemplazo inmediato del CEO quien podría incluso estar involucrado en casos de abuso sexual.
Por si esto fuera poco, la renuncia de la ex copresidenta de Blizzard, Jen Oneal, dejó tras de sí otra serie de acusaciones en la que manifestaba sentirse utilizada, discriminada y marginada. Por lo visto los demonios andan sueltos en la compañía y hasta ahora no hay quien los exorcice.
Al parecer todos estos prolegómenos, ya han girado la vista hacia Activision Blizzard de varios entes gubernamentales, uno de ellos la Comisión de Valores de EEUU. Es posible que pronto se inicien investigaciones y tal vez estas puedan conducir a la verdad.
Por ahora, hay que esperar a que ocurre en las próximas horas con el CEO Bobby Kotick, con respecto a un hipotético despido o a si termina renunciando al cargo. Mientras tanto, los demonios siguen sueltos en Blizzard.
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