La segunda temporada de Bungou Stray Dogs concluyó el día de hoy en su doceavo capítulo, cerrando así un año de éxitos para el estudio BONES (Boku no Hero Academia y Mob Psycho), este anime nos trajo una propuesta interesante que contrastaba con su historia típica del género de los shounen y fue la inclusión de personajes basados en escritores destacados y sus obras (en su mayoría japoneses) dentro de la serie.
El inicio de esta segunda temporada nos tomó por sorpresa, con un interesante flashback del tiempo del personaje de Osamu Dazai antes de ser parte de la Agencia Armada de Detectives, y ejerciendo su papel como uno de los jefes más fuertes dentro de Port Mafia. Además de los conflictos que lo llevaron replantearse su labor y la muerte de uno de sus mejores amigos Sakunosuke Oda.
Luego de unos capítulos de recuerdos, volvimos a la historia principal (donde la dejamos la temporada pasada) y la amenaza extranjera de Guild, la lucha entre tres bandos (Guild, Port Mafia, Agencia de Detectives) veía difícil la victoria para el bando de nuestro protagonista, no es hasta los últimos capítulos que Atsushi pensó en aliarse con la Port Mafia para defender la ciudad que tanto querían.
En este capítulo final vimos el desenlace del enfrentamiento entre algunos de los personajes más fuertes de la temporada; Atsushi Nakajima, Ryunosuke Akutagawa y Francis Fitzgerald. Este último intentaba destruir la ciudad de Yokohama para recuperar un libro que le permitiría revivir a su fallecida hija.
Akutagawa y Atsushi dejaron su rivalidad para aliarse en contra Fitzgerald, combinando sus poderes Rashomon (Akutagawa) y Bestia bajo la luz de la luna (Atsushi) para vencer definitivamente al líder de Guild. Sin embargo, cuando creíamos que todo había acabado y la nave Moby-Dick no destruiría la ciudad, un misterioso personaje provoca que la nave retome su descenso hacia la ciudad. Es aquí donde se da uno de los momentos más emocionales del capítulo, ya que la única capaz de salvar la ciudad era Kyouka Izumi que se encontraba prisionera por la policía en un dron cercano hizo estrellarse este avión para salvar Yokohama.
Así, uno de los personajes más queridos de la serie se sacrificaba buscando de esa manera expiar sus pecados pasados (todas las vidas que fueron arrebatadas por su poder: Yasha Shirayuki). Para suerte de Atsushi –y todos nosotros- este sacrificio le permitió convertirse en miembro pleno de la Agencia, de esta forma el poder del presidente “Todos nacen iguales” pudo permitir a Kyouka escapar y salvarse. Aunque la felicidad también llego para Akutagawa que al fin escucho las palabras que siempre quiso oír de su mentor Dazai: “te has hecho fuerte”, provocando el desmayo de su ex-pupilo.
Finalmente tenemos escenas de celebración por parte de los bandos ganadores, mientras que los sobrevivientes de Guild se reagrupaban o volvían a sus lugares de origen. En la Agencia, le preparan una fiesta sorpresa para la bienvenida de Kyouka como miembro oficial. Dazai quien no se encontraba en la fiesta se reunía con uno de sus viejos compañeros Ryouru Hirotsu explicándole que un nuevo mal se acerca y que el trabajo en equipo de Akutagawa y Atsushi es fundamental para vencer al nuevo enemigo.
De esta forma queda abierto el final a una tercera temporada, en las escenas finales aparece Nathaniel Hawthorne en la base del nuevo enemigo quien resulta ser Fiodor Dostoievski, que será ayudado por Nathaniel mientras este pueda curar a Margaret. La serie termina con Akutagawa y Atsushi cara a cara bajo la luz de la luna.
Este anime cumplió a cabalidad con las expectativas de los fans y eso ha quedado demostrado en las encuestas de popularidad en Japón. Desde nuestro punto de vista, las dos temporadas tuvieron un gran nivel argumental que nos permitieron mantenernos expectantes cada semana con cada capítulo. Vale la pena resaltar el cuidado al detalle puesto a sus personajes y su vinculación con los autores en la vida real y sus obras.
Mezclando literatura con anime, tuvieron un resultado fabuloso de acción y comedia, sin dejar de lado el dramatismo, además de poseer grandes personajes –mención especial a Ranpo- como Atsushi quién con una fuerte historia y dramática logró ser un buen principal, a pesar de tener que competir con Dazai que con su carisma, inteligencia y sus intentos de suicidio, se robaba cada escena en la que tomaba parte.
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